Con una atención al cliente excepcional, la Posada Mi Vieja Escuela brinda un trato amable y personalizado a todos sus visitantes. El horario de atención es flexible y se adapta a las necesidades de los huéspedes, brindando un servicio de calidad durante toda su estadía.
Las instalaciones de esta posada son encantadoras, con una decoración rústica y acogedora que invita a los huéspedes a sentirse como en casa. Las habitaciones están equipadas con todas las comodidades necesarias para una estancia confortable y placentera. Además, la limpieza y el orden son aspectos destacables que brindan una sensación de tranquilidad y bienestar a quienes se hospedan aquí.
Los servicios ofrecidos por la Posada Mi Vieja Escuela son variados y se adaptan a las necesidades de cada huésped. Desde la conexión Wi-Fi gratuita hasta el servicio de lavandería, se busca satisfacer todas las demandas y requerimientos. El personal siempre está dispuesto a ayudar y proporcionar información turística sobre los lugares de interés cercanos y las actividades disponibles en la zona.
La ubicación de la posada en el pintoresco pueblo de San Pedro del Rio es otro punto a favor para aquellos que buscan tranquilidad y contacto con la naturaleza. Rodeada de hermosos paisajes montañosos, brinda la oportunidad de disfrutar de caminatas, excursiones y actividades al aire libre.
En definitiva, la Posada Mi Vieja Escuela es un lugar encantador que ofrece una experiencia única y acogedora a sus huéspedes. Con un servicio de calidad, unas instalaciones confortables y una ubicación privilegiada, se ha ganado la valoración media de 4.1 sobre 5 como uno de los mejores lugares para alojarse en San Pedro del Rio, Venezuela.
CÓMO LLEGAR AHORA
LLAMAR: +58 277-2913720
Dirección: Casa, 2-3 Carrera Calanzancio, San Pedro del Rio 5003, Táchira, Venezuela
Horario de Posada Mi Vieja Escuela
Opiniones de Posada Mi Vieja Escuela
La posada Mi Vieja Escuela en San Pedro del Río es simplemente encantadora. Desde el momento en que llegas, te sientes como en casa. La atención y el cariño de los lugareños son realmente destacables. La pareja dueña de la posada, Berta y Trino, te reciben con una sonrisa y un afecto genuino.
El ambiente de la posada es acogedor y cómodo, sin perder el encanto de una verdadera casa. Las habitaciones son deliciosas, te hacen sentir como si estuvieras en tu propia habitación. No puedo evitar mencionar la cascada de risa de Berta, que contagia a todos los huéspedes de alegría.
Pero lo que realmente destaca de esta posada son sus dulces. ¡Son una verdadera delicia! Recomiendo probar todos los sabores de su dulcería: limonzón, clásico, Cidra, leche cortada y quesillo de coco. Cada bocado es una explosión de sabor que te transporta a la tradición culinaria de la región.
San Pedro del Río es un pueblo andino bellísimo y turístico, lleno de tiendas de artesanías y comidas típicas. Es un lugar idílico, mágico y lamentablemente desconocido para muchos. Sin embargo, merece estar en el tope de los sitios de mayor afluencia de turistas.
Mi experiencia en la posada Mi Vieja Escuela fue excelente. La atención de Berta y Trino, el ambiente acogedor y los increíbles dulces caseros hacen de este lugar un destino imperdible. Si estás buscando un lugar para hospedarte en San Pedro del Río, no dudes en elegir esta posada. No te arrepentirás.
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